Salmos 106-117

SALMO 106
Confesión de los fracasos de Israel
 

1
¡Aleluya!
¡Alabad a Jehovah, porque es bueno; porque para siempre es su misericordia! 
2 ¿Quién declarará las proezas de Jehovah? ¿Quién hará oír todas sus alabanzas? 
3 Bienaventurados los que guardan el derecho, los que en todo tiempo hacen justicia. 
4 Acuérdate de mí, oh Jehovah, según tu benevolencia para con tu pueblo. Visítame con tu salvación,
5 para que vea el bien de tus escogidos, para que me alegre con la alegría de tu pueblo, para que me gloríe con tu heredad. 
6 Hemos pecado como nuestros padres; hemos hecho iniquidad; hemos actuado impíamente. 
7 Nuestros padres en Egipto no entendieron tus maravillas; no se acordaron de tus innumerables hechos de misericordia, sino que se rebelaron junto al mar, el mar Rojo. 
8 Sin embargo, los libró por amor de su nombre, para dar a conocer su poder. 
9 Reprendió al mar Rojo y lo secó; los hizo ir por los abismos, como por un desierto. 
10 Los libró del enemigo; los rescató de mano del adversario. 
11 Las aguas cubrieron a sus enemigos; no quedó uno solo de ellos. 
12 Entonces creyeron en sus palabras y cantaron su alabanza. 
13 Pero pronto se olvidaron de sus obras y no esperaron su consejo. 
14 Ardieron de apetito en el desierto y probaron a Dios en la soledad. 
15 El les dio lo que pidieron, pero envió a sus almas debilidad. 
16 Después tuvieron celos de Moisés en el campamento, y de Aarón, el consagrado de Jehovah. 
17 La tierra se abrió y tragó a Datán, y cubrió al grupo de Abiram. 
18 El fuego se encendió contra su grupo; la llama devoró a los impíos. 
19 En Horeb hicieron un becerro y se postraron ante una imagen de fundición. 
20 Así cambiaron su gloria por la de un toro que come hierba. 
21 Olvidaron al Dios de su salvación que había hecho grandezas en Egipto, 
22 maravillas en la tierra de Cam, cosas formidables junto al mar Rojo. 
23 El dijo que los hubiese destruido, de no haberse interpuesto Moisés, su escogido, ante él en la brecha, a fin de aplacar su ira, para que no los destruyera. 
24 Sin embargo, aborrecieron la tierra deseable, y no creyeron en su palabra. 
25 Más bien, murmuraron en sus tiendas y no escucharon la voz de Jehovah. 
26 Por tanto, alzó su mano contra ellos para postrarlos en el desierto, 
27 para dispersar a sus descendientes entre las naciones y esparcirlos por las tierras. 
28 Cuando se adhirieron al Baal de Peor, comieron de los sacrificios de los muertos. 
29 Provocaron a Dios con sus obras, y se desató entre ellos la mortandad. 
30 Entonces se levantó Fineas y ejecutó juicio, y se detuvo la mortandad. 
31 Aquello le fue contado por justicia, de generación en generación y para siempre. 
32 También le indignaron en las aguas de Meriba, y por causa de ellos le fue mal a Moisés; 
33 porque hicieron que su espíritu se amargara, y él habló precipitadamente con sus labios. 
34 Tampoco destruyeron a los pueblos, como Jehovah les había dicho. 
35 Más bien, se mezclaron con gentiles, y aprendieron sus obras. 
36 Sirvieron a sus ídolos, los cuales llegaron a ser una trampa. 
37 Sacrificaron sus hijos y sus hijas a los demonios; 
38 derramaron la sangre inocente, la sangre de sus hijos y de sus hijas, que sacrificaron a los ídolos de Canaán. La tierra fue profanada con los hechos de sangre. 
39 Así se contaminaron con sus obras y se prostituyeron con sus hechos. 
40 Por tanto, la ira de Jehovah se encendió contra su pueblo, y abominó su heredad. 
41 Los entregó en poder de las naciones, y los que los aborrecían se enseñorearon de ellos. 
42 Sus enemigos los oprimieron, y fueron quebrantados debajo de su mano. 
43 Muchas veces los libró, pero ellos se rebelaron contra su consejo y fueron humillados a causa de su iniquidad. 
44 Con todo, él los vio cuando estaban en angustia, y oyó su clamor. 
45 Se acordó de su pacto con ellos, y se compadeció conforme a su gran compasión. 
46 Asimismo, hizo que tuviesen misericordia de ellos todos los que los tenían cautivos. 
47 ¡Sálvanos, oh Jehovah, Dios nuestro! Reúnenos de entre las naciones, para que confesemos tu santo nombre, para que nos gloriemos en tus alabanzas. 
48 ¡Bendito sea Jehovah Dios de Israel, desde la eternidad hasta la eternidad! Y diga todo el pueblo: "¡Amén!" ¡Aleluya! 

SALMO 107
Salmo de gratitud por la liberación
 

1
¡Alabad a Jehovah, porque es bueno;
porque para siempre es su misericordia! 
2 Díganlo los redimidos de Jehovah, los que ha redimido del poder del enemigo 
3 y los que ha congregado de las tierras del oriente y del occidente, del norte y del sur. 
4 Perdidos anduvieron por el desierto, en el sequedal; no hallaron camino hacia una ciudad habitada. 
5 Estaban hambrientos y sedientos; sus almas desfallecían en ellos. 
6 Pero cuando en su angustia clamaron a Jehovah, él los libró de sus aflicciones. 
7 Los dirigió por camino derecho, para que fuesen a una ciudad en que habitar. 
8 ¡Den gracias a Jehovah por su misericordia y por sus maravillas para con los hijos del hombre! 
9 Porque él sacia al alma sedienta y llena de bien al alma hambrienta. 
10 Habitaban en tinieblas y en densa oscuridad, aprisionados en la miseria y en cadenas de hierro, 
11 porque fueron rebeldes a las palabras de Jehovah y aborrecieron el consejo del Altísimo. 
12 Por eso sometió sus corazones con dura labor; cayeron, y no hubo quien les ayudase. 
13 Pero cuando en su angustia clamaron a Jehovah, él los libró de sus aflicciones. 
14 Los sacó de las tinieblas, de la densa oscuridad, y rompió sus cadenas. 
15 ¡Den gracias a Jehovah por su misericordia y por sus maravillas para con los hijos del hombre! 
16 Porque rompió las puertas de bronce y desmenuzó los cerrojos de hierro. 
17 Fueron afligidos los insensatos, a causa de su camino rebelde y a causa de sus maldades. 
18 Sus almas abominaron toda comida, y llegaron hasta las puertas de la muerte. 
19 Pero cuando en su angustia clamaron a Jehovah, él los libró de sus aflicciones. 
20 Envió su palabra y los sanó; los libró de su ruina. 
21 ¡Den gracias a Jehovah por su misericordia y por sus maravillas para con los hijos del hombre! 
22 Ofrezcan sacrificios de acción de gracias y proclamen sus obras con júbilo. 
23 Los que descienden al mar en los barcos y hacen negocios en los océanos, 
24 ellos han visto las obras de Jehovah, y sus maravillas en lo profundo del mar. 
25 El habló y desató el viento de la tempestad, e hizo que se elevaran sus olas. 
26 Subieron los cielos, descendieron los abismos; sus almas se derretían con el daño. 
27 Se tambalearon y temblaron como un borracho, y toda su sabiduría se echó a perder. 
28 Pero cuando en su angustia clamaron a Jehovah, él los libró de sus aflicciones. 
29 El trae calma a la tempestad, y se apaciguan sus olas. 
30 Entonces se alegran porque ellas se aquietan, y él los guía al puerto que desean. 
31 ¡Den gracias a Jehovah por su misericordia y por sus maravillas para con los hijos del hombre! 
32 Exáltenlo en la congregación del pueblo, y alábenlo en la reunión de los ancianos. 
33 El convierte los ríos en desierto y las fuentes de aguas en tierra sedienta. 
34 Convierte las tierras fértiles en salobres por la maldad de los que las habitan. 
35 Convierte el desierto en estanques de agua y la tierra seca en manantiales. 
36 Allí establece a los hambrientos y fundan una ciudad en que habitar. 
37 Siembran campos, plantan viñas y logran abundante fruto. 
38 Los bendice, y se multiplican en gran manera; y no deja que disminuya su ganado. 
39 Cuando son reducidos en número y menoscabados a causa de la opresión, de la calamidad y de la congoja, 
40 derrama menosprecio sobre los príncipes, y les hace andar errantes, vagabundos, sin camino. 
41 Y levanta de la miseria al necesitado y hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas. 
42 Véanlo los rectos y alégrense; pero toda maldad cierre la boca. 
43 Quien sea sabio y guarde estas cosas entenderá los hechos misericordiosos de Jehovah. 

SALMO 108
La liberación divina
 

(Cántico. Salmo de David) 
1 Mi corazón está firme, oh Dios; cantaré y entonaré salmos, aun con mi alma. 
2 ¡Despertad, oh arpa y lira! Despertaré al alba. 
3 Te alabaré entre los pueblos, oh Jehovah; a ti cantaré salmos entre las naciones. 
4 Porque grande, más que los cielos, es tu misericordia; y hasta las nubes, tu verdad. 
5 ¡Seas exaltado sobre los cielos, oh Dios; y sobre toda la tierra, tu gloria! 
6 Salva con tu diestra y respóndenos, de modo que sean librados tus amados. 
7 Dios ha hablado en su santuario: "¡Cómo me regocijo! Repartiré Siquem y mediré el valle de Sucot. 
8 Mío es Galaad, y mío es Manasés. Efraín es la fortaleza de mi cabeza; Judá es mi cetro. 
9 Moab es la vasija en que me lavo; sobre Edom echaré mis sandalias, y sobre Filistea lanzaré mi grito de victoria." 
10 ¿Quién me guiará a la ciudad fortificada? ¿Quién me conducirá hasta Edom? 
11 ¿No serás tú, oh Dios, que nos habías desechado, y que ya no sales, oh Dios, con nuestros ejércitos? 
12 Danos socorro ante el enemigo, pues vana es la liberación que da el hombre. 
13 Con Dios haremos proezas, y él aplastará a nuestros enemigos. 

SALMO 109
Apelación a la justicia divina
 

(Al músico principal. Salmo de David) 
1 Oh Dios de mi alabanza, no guardes silencio, 
2 pues la boca del impío y la del engañador se han abierto contra mí; han hablado contra mí con lengua engañosa. 
3 Con palabras de odio me han rodeado; sin causa han luchado contra mí. 
4 En pago de mi amor me han acusado, aunque yo oraba. 
5 Me han devuelto mal por bien, y odio por amor. 
6 Levanta contra él a un impío, y un acusador esté a su mano derecha. 
7 Cuando sea juzgado, que resulte culpable, y que su oración sea tenida por pecado. 
8 Sean pocos sus días, y tome otro su oficio. 
9 Queden huérfanos sus hijos, y su mujer quede viuda. 
10 Anden sus hijos vagabundos y mendigando; procuren su pan lejos de sus casas arruinadas. 
11 Que el acreedor se apodere de todo lo que tiene, y extraños saqueen el fruto de su trabajo. 
12 No tenga quien le haga misericordia, ni haya quien se compadezca de sus huérfanos. 
13 Su posteridad sea destruida; en la segunda generación sea borrado su nombre. 
14 Sea recordada ante Jehovah la maldad de sus padres; no sea borrado el pecado de su madre. 
15 Estén siempre delante de Jehovah, y elimine él de la tierra la memoria de ellos. 
16 Porque no se acordó de mostrar misericordia, y persiguió al hombre pobre, necesitado y quebrantado de corazón, hasta matarlo. 
17 Amó la maldición; ¡que ésta le venga! No quiso la bendición; ¡que se aleje de él! 
18 Vístase de maldición como de su manto, y entre ella como agua en sus entrañas y como aceite en sus huesos. 
19 Séale como vestido que lo cubra, y como cinturón que siempre lo ciña. 
20 Este sea el pago de parte de Jehovah para con los que me acusan, para los que hablan mal contra mi vida. 
21 Pero tú, oh Jehovah el Señor, favoréceme, por amor de tu nombre; líbrame, porque buena es tu misericordia. 
22 Yo soy pobre y necesitado, y mi corazón está herido dentro de mí. 
23 Voy como la sombra cuando se extiende; soy sacudido como la langosta. 
24 Mis rodillas están debilitadas a causa del ayuno, y mi carne está desfallecida por falta de alimento. 
25 Fui para ellos objeto de oprobio; me miraban y movían la cabeza. 
26 Ayúdame, oh Jehovah, Dios mío; sálvame conforme a tu misericordia. 
27 Entiendan que ésta es tu mano, y que tú, oh Jehovah, has hecho esto. 
28 Que maldigan ellos, pero bendice tú; que se levanten, pero sean avergonzados. Y que tu siervo se regocije. 
29 Sean vestidos de ignominia los que me calumnian, y vístanse con su vergüenza como de manto. 
30 Agradeceré a Jehovah en gran manera con mi boca; en medio de muchos le alabaré. 
31 Porque él se pondrá a la derecha del necesitado, para salvar su vida de los que le juzgan. 

SALMO 110
El sacerdocio del Mesías
 

(Salmo de David) 
1 Jehovah dijo a mi señor: "Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos como estrado de tus pies." 
2 Jehovah enviará desde Sion el cetro de tu poder; domina en medio de tus enemigos. 
3 En el día de tu poder, tu pueblo se te ofrecerá voluntariamente en la hermosura de la santidad. Desde el nacimiento de la aurora, tú tienes el rocío de la juventud. 
4 Jehovah juró y no se retractará: "Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec." 
5 El Señor está a tu mano derecha; aplastará a los reyes en el día de su ira. 
6 Juzgará entre las naciones; las llenará de cadáveres. Aplastará a los jefes sobre la extensa tierra. 
7 Beberá del arroyo en el camino, por lo cual levantará su cabeza. 

SALMO 111
Bondad y fidelidad divinas
 

1
¡Aleluya!
Daré gracias a Jehovah con todo mi corazón, en la reunión y en la congregación de los rectos. 
2 Grandes son las obras de Jehovah, buscadas por todos los que se complacen en ellas. 
3 Gloria y hermosura es su obra, y su justicia permanece para siempre. 
4 Hizo memorables sus maravillas; clemente y misericordioso es Jehovah. 
5 Da alimento a los que le temen; para siempre se acordará de su pacto. 
6 El poder de sus obras manifestó a su pueblo, al darle la heredad de las naciones. 
7 Las obras de sus manos son verdad y justicia; fieles son todas sus ordenanzas. 
8 Son afirmadas eternamente y para siempre, hechas con verdad y rectitud. 
9 Ha enviado redención a su pueblo; para siempre ha ordenado su pacto. Santo y temible es su nombre. 
10 El principio de la sabiduría es el temor de Jehovah. Buen entendimiento tienen todos los que ponen esto por obra. Su loor permanece para siempre. 

SALMO 112
Prosperidad del que teme a Jehovah

1 ¡Aleluya!
Bienaventurado el hombre que teme a Jehovah, y en sus mandamientos se deleita en gran manera. 
2 Su descendencia será poderosa en la tierra; la generación de los rectos será bendita. 
3 Bienes y riquezas hay en su casa; su justicia permanece para siempre. 
4 En las tinieblas resplandece la luz para los rectos; él es clemente, misericordioso y justo. 
5 El hombre de bien tiene compasión y presta, y administra sus cosas con justicia. 
6 Por eso no resbalará jamás; para siempre será recordado el justo. 
7 De las malas noticias no tendrá temor; su corazón está firme, confiado en Jehovah. 
8 Afianzado está su corazón; no temerá, hasta que vea en sus enemigos su deseo. 
9 Esparce, da a los necesitados; su justicia permanece para siempre, y su poderío será exaltado en gloria. 
10 Lo verá el impío y se irritará; crujirá los dientes y se consumirá. El deseo de los impíos perecerá. 

SALMO 113
Dios levanta a los pobres
 

1
¡Aleluya!
¡Alabad, oh siervos de Jehovah, alabad el nombre de Jehovah! 
2 Sea bendito el nombre de Jehovah desde ahora y para siempre. 
3 Desde el nacimiento del sol y hasta donde se pone, sea alabado el nombre de Jehovah. 
4 Alto sobre todas las naciones es Jehovah; sobre los cielos es su gloria. 
5 ¡Quién como Jehovah nuestro Dios! El que mora en lo alto 
6 y se humilla para mirar en el cielo y en la tierra. 
7 Levanta del polvo al pobre, y al necesitado enaltece desde la basura, 
8 para hacerle sentar con los nobles, con los nobles de su pueblo. 
9 El hace habitar en familia a la estéril, feliz de ser madre de hijos. ¡Aleluya! 

SALMO 114
Recuerdos de la salida de Egipto

1
Cuando Israel salió de Egipto,
la casa de Jacob de un pueblo extranjero, 
2 Judá fue su santuario, e Israel su señorío. 
3 El mar lo vio y huyó; el Jordán se volvió atrás. 
4 Los montes brincaron como carneros, y las colinas como corderitos. 
5 ¿Qué tuviste, oh mar, para que huyeras? ¿Y tú, oh Jordán, para que te volvieras atrás? 
6 Oh montes, ¿por qué brincasteis como carneros; y vosotras, oh colinas, como corderitos? 
7 Ante la presencia del Señor tiembla la tierra; ante la presencia del Dios de Jacob, 
8 quien convirtió la peña en estanque de aguas y el pedernal en manantial de aguas. 

SALMO 115
Contraste entre Jehovah y los ídolos
 

1
No a nosotros, oh Jehovah,
no a nosotros, sino a tu nombre da gloria por tu misericordia y tu verdad. 
2 ¿Por qué han de decir las naciones: "¿Dónde está su Dios?" 
3 ¡Nuestro Dios está en los cielos! ¡Ha hecho todo lo que ha querido! 
4 Los ídolos de ellos son de plata y oro, obra de manos de hombres. 
5 Tienen boca, pero no hablan; tienen ojos, pero no ven; 
6 tienen orejas, pero no oyen; tienen nariz, pero no huelen; 
7 tienen manos, pero no palpan; tienen pies, pero no andan; no emiten sonido con sus gargantas. 
8 Como ellos, son los que los hacen y todos los que en ellos confían. 
9 ¡Oh Israel, confía en Jehovah! El es su ayuda y su escudo. 
10 ¡Oh casa de Aarón, confía en Jehovah! El es su ayuda y su escudo. 
11 ¡Los que teméis a Jehovah, confiad en Jehovah! El es su ayuda y su escudo. 
12 Jehovah se acuerda de nosotros; él nos bendecirá. Bendecirá a la casa de Israel, bendecirá a la casa de Aarón. 
13 Bendecirá a los que temen a Jehovah, a pequeños y a grandes. 
14 Jehovah aumentará bendición sobre vosotros, sobre vosotros y sobre vuestros hijos. 
15 Benditos seáis de Jehovah, quien hizo los cielos y la tierra. 
16 Los cielos de los cielos son de Jehovah; pero él ha dado la tierra a los hijos del hombre. 
17 No alaban a Jehovah los muertos, ni cuantos descienden al silencio. 
18 Pero nosotros bendeciremos a Jehovah desde ahora y para siempre. ¡Aleluya! 

SALMO 116
Gratitud al ser librado de la muerte
 

1
Amo a Jehovah,
pues ha escuchado mi voz y mis súplicas, 
2 porque ha inclinado a mí su oído. Por tanto, le invocaré todos mis días. 
3 Me rodearon las ataduras de la muerte; me encontraron las angustias del Seol. En angustia y en dolor me encontraba. 
4 Entonces invoqué el nombre de Jehovah, diciendo: "¡Libra, oh Jehovah, mi vida!" 
5 Clemente y justo es Jehovah; sí, misericordioso es nuestro Dios. 
6 Jehovah guarda a los ingenuos; estaba yo postrado, y él me salvó. 
7 Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, porque Jehovah te ha favorecido. 
8 Porque tú has librado mi vida de la muerte, mis ojos de las lágrimas y mis pies de la caída. 
9 Andaré delante de Jehovah en la tierra de los vivientes. 
10 Creí; por tanto, hablé, estando afligido en gran manera. 
11 Y dije en mi apresuramiento: "Todo hombre es mentiroso." 
12 ¿Qué daré a Jehovah por todas sus bendiciones para conmigo? 
13 Alzaré la copa de la salvación e invocaré el nombre de Jehovah. 
14 Cumpliré mis votos a Jehovah delante de todo su pueblo. 
15 Estimada es en los ojos de Jehovah la muerte de sus fieles. 
16 Escúchame, oh Jehovah, porque yo soy tu siervo; soy tu siervo, hijo de tu sierva. Tú rompiste mis cadenas. 
17 Te ofreceré sacrificio de acción de gracias e invocaré el nombre de Jehovah.
18 Cumpliré mis votos a Jehovah delante de todo su pueblo, 
19 en los atrios de la casa de Jehovah, en medio de ti, oh Jerusalén. ¡Aleluya! 

SALMO 117
Llamado a la alabanza
 

1
¡Alabad a Jehovah, naciones todas!
¡Pueblos todos, alabadle! 
2 Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia, y la verdad de Jehovah es para siempre. ¡Aleluya!

 
Descargas Gratis
Descargas de Musica, videos, peliculas, programas y muchos recursos mas
(234 in 330 out)

Gratis lo que quieras
Descargas Gratis
(2 in 460 out)

web cristiana
pagina netamente cristiana
(1 in 357 out)

Red Cristiana Evangelica
Reflexiones cristianas, meditaciones, artìculos, hermosas melodias y mucho mas
(1 in 279 out)

Enseñanzas de la Escritura
Estudios y reflexiones
(0 in 257 out)

Separadores Cristianos
Separadores, Tarjetitas, Wallpaper, entre otros
(0 in 709 out)

Union Juvenil Eben-Ezer
Grupo de Jovenes donde nuestro Actor Principal es Cristo
(0 in 415 out)

Debe quedarse este link aquí?
Entonces inscríbete aquí:
=> Inscripción
 
Hoy han entrado 1 visitantes (1 clics a subpáginas) ¡A tu página!
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis